La microempresa es uno de los componentes más importantes de la economía mexicana, con un 95% de participación en el mercado. Su plantilla pequeña y bajo volumen de facturación son algunas de las principales características que la hacen una de las categorías predominantes en el tejido productivo.
En este artículo te explicamos qué es una microempresa, cómo se diferencia de los demás tipos de empresas, sus ventajas y dificultades, como también algunos ejemplos de microempresas.
¿Qué es una microempresa?
Una microempresa es un tipo de organización más pequeña que el resto, con una plantilla y ganancias delimitadas que dependen del país en el que desarrollen la actividad. En México, las microempresas suelen estar conformadas por hasta 10 empleados y su facturación no debe de superar los 4 millones de pesos.
De hecho, una microempresa suele estar conformada por familias, y es común que la administración de la misma se lleve a cabo por el propio dueño. A pesar de estos factores, de acuerdo con la Secretaría de Economía, este modelo representa el 95% del total de empresas del país y el 15% del producto interno bruto (PIB).
A diferencia de la PYME, que puede tener hasta 50 trabajadores, la microempresa se limita a contar con esos 10 empleados que mencionamos como máximo. Por ello, la naturaleza de su clasificación tiene que ver más con la supervivencia y la lucha por crecer dentro de las posibilidades económicas.
Tipos de microempresa
De acuerdo con su origen y recursos, podemos dividir los tipos de microempresa según tres categorías:
Supervivencia
Una microempresa de supervivencia se crea desde una necesidad económica, por lo que no cuentan con un presupuesto, una inversión, financiación o capital base. Justamente, se caracterizan por ser de producción inmediata y acotada.
Los ejemplos en esta categoría abundan y se dirigen directamente a las personas que deciden emprender por su cuenta, solos, en familia o con amigos en rubros como pastelería, indumentaria de diseño propio, joyería artesanal, entre otros.
Expansión
A diferencia del tipo anterior, una microempresa en expansión cuenta con el dinero necesario para crecer y contratar más mano de obra. Conforme genera ingresos, este negocio puede crecer hasta lograr condiciones suficientes de transformación.
Transformación
Ahora bien, la microempresa de transformación ya posee una mayor facturación con la cual puede formar un capital que le permita crecer mucho más rápido que la de expansión.
Puede ser una persona con capital suficiente para tener su propio local de café, una plantilla de empleados relativamente mediana y ganancias suficientes para sostener la actividad.
Características que diferencian a una microempresa
Hasta el momento te comentamos dos características claves de una microempresa: se conforma por 10 o menos personas y su facturación anual no supera los 4 millones de pesos. Sin embargo, existen también otros aspectos que te ayudarán a identificar una microempresa.
A continuación, te mencionamos las siguientes cualidades:
- Solo cuentan con dos niveles jerárquicos: Los mismos se dividen entre el dueño, o jefe, y el resto de colaboradores.
- No suelen producir en cadena: A pesar de que no tienen la espalda para sostener una producción en cadena, pueden usar la estructura para las materias primas y la mano de obra.
- Su nicho de mercado es bien definido: Siendo emprendimientos muy pequeños, su nicho siempre será local y acotado, tal vez incluso a una zona puntual de la ciudad o vecindario.
Ejemplos
Ahora bien, ya conoces todo lo que una microempresa debe tener para llamarse como tal. Hay múltiples negocios que pueden entrar en esta categoría por su rentabilidad y bajo costo. Por eso, te nombramos algunos de ellos:
- Cerrajería
- Almacén
- Lavandería
- Peluquería
- Frutería
- Carnicería
- Taller mecánico
- Nevería
- Panadería
- Relojero
- Rubro textil: castuera, diseño de indumentaria, sastrería
- Taquería
- Reciclaje
Ventajas y desventajas de las microempresas
Si estás pensando en montar tu propia microempresa, tal vez te sea útil también conocer algunas de las ventajas y desafíos que puedes llegar a encontrar en ese camino.
Entre las ventajas de empezar como microempresa se pueden mencionar las siguientes:
- Al centrarse en un dueño, las decisiones se toman más rápidamente
- Los trámites son fáciles de realizar y no tan burocráticos
- Requiere poca inversión inicial
- Puedes brindar un servicio más personalizado e identificar mejoras
- Genera nuevos empleos
Por su parte, como obstáculos encontramos los siguientes:
- Si bien existen varios programas de apoyo (FONDESO, NAFIN, FOJAL) el volumen de microempresas es tan grande que resulta insuficiente.
- El alto costo de la tecnología puede dejar a las microempresas en una brecha digital con respecto a las empresas más grandes.
- Alta competencia
- Quienes emprenden por su cuenta suelen ser autodidactas o heredan el conocimiento de un familiar, por lo que hay una carencia de formación especializada.
Conclusión
Ahora ya conoces qué es una microempresa, qué desafíos puedes llegar a enfrentar y en qué rubros puedes emprender tu propio negocio con estas características. Recuerda que pueden surgir de una necesidad de supervivencia como de una ambición de transformación.
Este tipo de emprendimientos constituyen buena parte de la economía productiva, por lo que si bien enfrentan constantes obstáculos para crecer, también sostienen a muchas familias y estructuras de producción.