La demanda del petróleo Brent y petróleo West Texas Intermediate avanzaron con a raíz de las esperanzas de crecimiento económico en China.
El mercado espera datos clave durante los próximos días, ya que las cifras oficiales de inventarios de la Administración de Información de Energía (EIA) se conocerán en las próximas horas.
El aumento de manufacturas de China impacta en el precio del petróleo
Hasta el último día de febrero, el petróleo había atravesado una caída frente a la desaceleración de la economía estadounidense. Pero con la llegada de marzo, el mercado amaneció con un aumento del crudo en sus variedades Brent y West Texas Intermediate. El factor detrás de este aumento del petróleo es la esperanza de un fuerte repunte de la demanda China. El país asiático sigue recuperándose de las restricciones estrictas que había impuesto contra la COVID-19.
Tanto el crudo Brent como el crudo West Texas Intermediate avanzaron entre un 1,3% y un 1,6% para ubicarse en los 83 dólares por barril. Sin embargo, la preocupación por nuevas subidas de tipos de interés en Estados Unidos y su efecto negativo en el consumo podrían llegar a limitar estas ganancias.
La actividad manufacturera de China creció en febrero a su ritmo más rápido en más de una década. El índice oficial de gestores de compras (PMI) del sector manufacturero chino subió a 52,6 el mes pasado, frente al 50,1 de enero. Además, una encuesta del sector privado también mostró un aumento de la actividad por primera vez en siete meses.
Todo esto alimentó las esperanzas de que la recuperación del país pueda contrarrestar la desaceleración mundial y aumentar la demanda de petróleo.
Un horizonte optimista para la economía China y el sector del petróleo
El mercado se ha vuelto optimista con respecto a la recuperación económica de China. Es así que el banco Goldman Sachs afirmó el domingo en una nota que espera “una sólida lectura del PMI manufacturero de 51 en febrero”, gracias a “la continua mejora en la demanda de acero y el consumo de carbón”.
Además, el Banco Popular de China (PBOC) anunció que esperaba que la economía nacional repuntó en general en el año 2023, aunque con un entorno exterior que seguirá siendo “severo y complejo.”
Así mismo, la institución también se comprometió a mejorar las expectativas sociales y la confianza, centrándose en respaldar la expansión de la demanda interna.
Por su parte, los economistas consultados por Reuters esperan que la actividad fabril del país asiático crezca en febrero.
«La recuperación económica china impulsará al alza su demanda de materias primas, y el petróleo será el más beneficiado«, afirmaron analistas de JPMorgan en una nota a sus clientes.