Los pagos en Latinoamérica se realizan a través de métodos alternativos. Así lo ha comprobado un estudio que comprueba que los pago digitales y alternativos representar el 39% de las transacciones totales. Se estima que esto se debe a que los clientes y las empresas prefieren metodologías más rápidas y sencillas.
Pero, ¿qué son los métodos alternativos de pago? Estas formas de transacción se caracteriza por la utilización de transferencias interbancarias, donde no intervienen tarjetas de crédito o débito.
Algunos ejemplos pueden ser las fintechs, los paytechs, los agregadores de pago y las plataformas de consorcio de CoDi.
Un breve paneo sobre el uso de los pagos alternativos en Latinoamérica
El mayor uso de estos métodos de pago en la región se registra en Chile, con una adopción que alcanza el 87%. Le sigue Brasil con un 84%, y Uruguay con un 74%.
La situación se replica en otros países de Latinoamérica. Es el caso de Colombia donde el uso del PSE (Pagos Seguros en Línea) representa el 50% de los pagos. Mientras que en Brasil el más popular es Pix donde se realizan el 44% de las transacciones.
Una oportunidad de crecimiento en México
En el caso de México se calcula que el 50% de la población tiene una cuenta bancaria, y el 20% de ellos posee una tarjeta de crédito. Marco Giordano, Country Manager de ETpay, declaró al respecto que en el país solo el 3% de las transacciones se realizan mediante canales alternativos.
El crecimiento de los pagos alternativos en México ha sido lento pero no inexistente. Podemos ver esta tendencia en el principal canal de transacciones, SPEI. El cual presentó un considerable crecimiento en las compras menores a 500 pesos: en 2010 las transacciones llegaron a 86 millones, mientras que para 2022 las mismas sobrepasaron el límite de los 2834 millones.
Jorge Vega, Gerente de Marketing y Alianzas Estratégicas de STP, aclaró que el uso de las tarjetas de crédito en Latinoamérica parece ir en detrimento de los canales digitales.
Para 2018, el 55% de los pagos en la región se realizaban con tarjeta de crédito. Al llegar el 2022, las mismas disminuyeron a 51%.
Las transferencias bancarias tomaron un camino totalmente distinto. Mientras que en 2018 llegaron al 4%, en 2022 alcanzaron el 20%.
A pesar del crecimiento tan tímido de los pagos alternativos en México, las pequeñas y medianas empresas ya empiezan a sospechar de los beneficios de utilizar estos canales. Actualmente, el principal medio de pago es el efectivo.
Pero poco falta para que las mismas prefieran la reducción de traslados y costos de movilidad de los pagos digitales. Ya que serán ellos los que le permitirán expandir sus operaciones y ampliar sus operaciones.